El nutricionista, Domingo Porras, destacó que para preparar las loncheras escolares se debe tener equilibrio en la composición del menú sin implementar dietas light que no suplan las energías calóricas gastadas por el niño durante su día en clases.
“Lo cierto del caso es que los niños tienen dos brotes de crecimiento (…) Orientarlo a comer nutritivo en una cosa pero orientarlo a comer light no es lo adecuado el niño necesita todos y cada uno de los nutrientes”, señaló.
Aseguró que el metabolismo de un niño en edad escolar es tres veces más aumentado que un adulto, entonces su gasto energético es mayor en corto tiempo, es por ello que resaltó la importancia de los alimentos seleccionados para las loncheras escolares.
“La indicación directa es que se supla el desayuno con estas loncheras y debe contener alrededor del 25 al 30% de las calorías que el niño consume en el día”, expresó el especialista.
Lo importante es el equilibrio en la composición de esa lonchera, señaló Porras quien además agregó que la selección de los alimentos saludables y los hábitos alimentarios son responsabilidad de padres y representantes.
“Muchísimas veces en las escuelas no existe la discrepancia entre un niño y otro no existe la atención probablemente para saber cuál es la dieta que está llevando, por lo que debe ir prescrito y debe ser recomendado por los padres, y los mismos deben instruirse”, mencionó.
Expresó que la idea de la merienda es que sirva como revitalizante o estimulador bioenergético para que complemente las energías gastadas durante todo su día. Agregó que la dieta puede variar y no ser encasillada para hacerla más atractiva para el pequeño.
“Una arepa, una rebana de pan y un bollito tiene 15 gramos de carbohidrato normalmente debe ser armónico un representante de cada grupo básico de alimentos, carbohidratos, frutas, proteínas y vegetales y por su puesto la hidratación”, explicó el especialista.
Agregó que no deben encasillarse en el sándwich que muchos nutricionistas recomiendan y sugieren las publicidades, “un trozo de pan canilla está bien, una arepa con porción de vegetales y proteínas también es adecuado”.
Porras mencionó que toda esta variedad de alimentos deben ir acompañados del agua que es el eje fundamental del niño, niña o adolescente.
En cuanto a los alimentos que no deben estar en las loncheras o al menos de forma perenne, resaltó los dulces y calorías vacías como las golosinas y bebidas con azúcar refinadas añadidas, “un niño siempre querrá dulces, lo importante es saber seleccionar alimentos que lo proporcionen como las frutas sin que esto les haga daño”.
Llamo a los padres a evitar las bebidas que venden prácticas en el mercado porque contienen altos porcentajes de calorías que generan a largo plazo problemas de obesidad, trastornos digestivos y diabetes.
“Si no tienen tiempo para realizar un batido de fruta para sustituir el 15% de carbohidrato que necesita es preferible que le coloque un trozo de frutas”, señaló.
Fuente: Noticias24
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